Las diosas del estanque están dormidas,
esperando la brisa, que acelere
la calma que en sus aguas se respira.
Está todo en silencio, todo quieto...
la niebla sobre el agua se abre paso,
un cántico de ninfas se ensordece
en los brotes..., al pié del viejo álamo.
El silencio se ha roto de repente...,
un eco se oye lejos, en el claro,
...tal vez una doncella, que parece
perdida en la espesura de los álamos.
Sus pasos se aceleran, y en la bruma
se dibuja una sombra, que camina
con paso acompasado de hojarasca...
Las ninfas expectantes, ya se asoman
entre las ramas del laurel florido..
entre los brotes del álamo fornido...
de todas partes salen en manada.
Se aproxima, temblorosa y afligida,
la doncella, que camina extraviada,
en su rostro un rictus de sorpresa
contemplando tan cálida acogida.
En el estanque, las diosas se despiertan
del letargo de la noche, tan calmada,
desperezan sus almas de poeta
y entonan unos cantos de alabanza.
Las ninfas de la fuente se han unido,
y cantan melodías afinadas,
...las Ondinas del estanque han respondido
alborotando las tranquilas aguas.
Emergen con las ondas blancas damas
que a la doncella preguntan qué le pasa...
_"estoy buscando al hada de los sueños,
que no quiere acudir a mi llamada."
No temas, doncella de los bosques...,
y déjate llevar por estas aguas,
que el hada de los sueños, esta noche,
parece que se encuentra extraviada.
Ven a sentarte al borde del estanque,
...y escucha bien los cantos que regala,
son las diosas, que componen unos versos
entre la bruma de la brisa alada.
_Sentóse la doncella en el estanque,
los cánticos escucha entusiasmada...,
la brisa le acaricia sus mejillas
y cae rendida al sueño de las hadas.
Las diosas acompasan sus sonidos,
las ninfas hacen coro con sus danzas,
...el hada de los sueños ha llegado
y encuentra a la docella adormilada.
Las ninfas de la fuente la reprenden,
las diosas le cuestionan su tardanza,
el hada de los sueños resplandece,
y a la doncella, dulces sueños le regala...
La bruma se hace eco de los versos,
y los cánticos suenan en cascada,
...los pájaros traen lírios y violetas
que a la doncella les sirven de almohada.
Así los sueños, siempre nos amparen,
entre ninfas y diosas encantadas,
y el hada de los sueños, adormezca
el alma, cada noche sin tardanza.
Maribel Cano
(derechos reservados 2014)